martes, 9 de junio de 2009

Mensaje para el Ratoncito Pérez

El domingo día 7 Biel nos comentó sonriente que se le movía otro diente.
Al mirarlo se le digo a Toño que lo tiene a punto que si lo gravamos y este me dice delante de Biel que aún lo veía un poco duro para intentar arrancarlo.
Así que para no hacer pasar un mal rato a mi niño grande, le digo que duerma con mucho cuidado y que no lo toque demasiado hasta el día siguiente.

Como todos los lunes, a eso de las 04:30, Toño marchó de nuevo dirección Jaca y al despertarse Biel pensé en intentar arrancar ese diente que estaba a punto de caramelo, pero al comentárselo a Biel va y me suelta:

"Aún está duro..."

Recordándome el comentario que su papi había hecho por la noche.
Al decirme esto sonriendo le digo que tenga mucho cuidado no vaya a ser que se lo trague y entonces no pueda ponerlo en su guarda dientes para que el ratoncito Pérez lo vea, y le deje su segundo regalito.
La verdad es que por la mañana me acordé en varias ocasiones del diente de Biel y al llegar a casa de la Yaya Encarna, Biel salió a recibirme, medio sonriente, medio preocupado enseñándome su boquita para que viese el hueco que había dejado su nuevo segundo diente.

Entonces la Yaya Encarna me cuenta como había pasado todo.
Biel había acabado el primero de comer y pidió permiso para irse a ver los dibujos de la tele. Los Yayos le dejaron porque se había portado muy bien y cuando el resto de la casa acababa de comer, Biel dio un grito y empezó a llorar desconsoladamente. La Yaya Encarna asustada fue en su busca pensando en qeu se había hecho daño, pero al llegar se encontró a Biel llorando muy preocupado porque ya no tenía el diente, sin darse cuenta se lo había tragado comiendo y la única preocupación que tenía era que el Ratoncito Pérez no le dejaría ningún regalito si no veía su segundo diente en el guarda dientes.

Yo le dije a Biel que no se preocupase porque el Ratoncito Pérez, aparte de mirar los guarda dientes, también mira las bocas y al mirar la suya vería que era verdad que le faltaba otro diente.
Pero Biel, un poco desconfiado y sin querer perderse su segundo regalito decidió que como ya sabe escribir le dejaría un pequeño mensaje al Ratoncito Pérez metiéndolo en el guarda dientes.

Imaginaros la situación...
A eso de las 23:00 más o menos, el Ratoncito Pérez pasó por su habitación, levantó la almohada para coger el guarda dientes, y sacando con unas pinzas de las cejas la nota que Biel había metido a presión en la pequeña cajita pudo leer lo que había escrito:

¡¡¡Ja, Ja, Ja...!!! Casi me muero de la risa y casi me pilla en plena acción. Fijaros que hasta incluso dibujó el diente antes de empezar a escribir... ¡¡¡Ja, Ja, Ja...!!!

Mi hombrecito pensaría...

NO ME QUEDO SIN EL REGALO NI EN BROMA!

Así que al Ratoncito Pérez no le quedó más remedio que dejar el regalito para Biel junto a la nota que había escrito para él...

Ja,Ja,Ja, no había diente pero se había ganado el regalito a pulso!

1 comentario:

  1. jajajajajaja si es que mi niño vale su peso en oro
    rosa que te imagino con las rodillas flojas de la risa y las pinzas en la mano jaja ja ja ja

    ana

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