Unas largas y divertidas vacaciones (1ª Parte)

Ahora que mis chicos me han dejado un rato libre intentaré enseñaros en varias entregas cómo lo hemos pasado este verano.
Cuando acabó el curso nuestros peques no pararon ni un segundo de diviertirse, descansaron varios días disfrutaron de la noche de San Joan,

montaron en los kars con papá,

y empezaron el Esplai (en algunas zonas le llaman campamento urbano).
El Esplai duró del 29 de Junio al 31 de Julio. Allí hicieron diversas actividades, divertidos juegos didácticos, ratos de piscina y la última semana eran salidas diarias en bus a la playa de nuestra ciudad, cosa que para ellos era toda una aventura.

En Julio también operaron a Marc de la boca, bueno más bien fue como la resturación de la Capilla Sixtina porque el pobre la traía fatal, hasta el punto de tener que extraerle un molar.

Todo salió bien la sala habilitada para el post-operatorio era espectacular, parecía que estábamos bajo el mar formando parte de la película de "Nemo".

Marc salió de quirófano luciendo una preciosa y blanquita sonrisa, orgulloso de sus dientes nuevos, hasta el punto de que cada vez que nos encontrábamos con alguien conocido, Marc le enseñaba sus dientes y no nos quedaba más remedio que explicar por qué lo hacía, para que la persona le dijese que estába más guapo que antes.

Estaba super contento porque vino el Ratoncito Pérez, el médico le mandó comer helados y además estaba más guapo que antes.

Mientras que llegaba la fecha del inicio de mis vacaciones y de las de Toño, y después del esplai, pasaron dos semanas en Cunit, Tarragona junto al primo Carlos y los Yayos.

Dos semanas de playa y piscina en las que se pusieron más negros que una morcilla y en las que Marc, de forma rápida y sorprendente aprendió a nadar, gracias a mami, al Yayo y a que veía a su primo y a su hermano jugando y haciendo el loco en la zona más honda de la piscina.

Fin de la 1ª entrega.